La señal del Mont du Chat es una cumbre que se encuentra en el macizo del Jura y que culmina a una altura de 1496 m., siendo el punto más alto de la población del Mont du Chat. Concretamente es límite entre los municipios de Bourget-du-Lac y Saint-Paul, en el extremo noroeste del Departamento de la Saboya. El macizo y en concreto la cumbre forman un extraordinario balcón natural del precioso lago de Bourget, así como de la ciudad de Aix-les-Bains.
Desde el punto de vista ciclista, el paso de montaña se ha ascendido en dos ocasiones, en 1974 con Gonzalo Aja como primer ciclista y recientemente, en 2017, Warren Barguil. El puerto, como podemos ver en la altimetría, representa un gran reto dada la dureza de su recorrido. También es complejo su descenso por sus dos vertientes, de ahí que tan solo se haya ascendido dos veces en grandes vueltas por etapas. A la memoria nos viene la aparatosa caída de Richie Porte en su descenso de la cara oeste el año 2017.
El paso, analizando su vertiente más atractiva, por Bourget-du-Lac, tiene una longitud de 13,5 kms. con una media del 9,2%, es decir, que en algo más de 13 kms. tendremos que superar la friolera de 1250 m. La escalada destaca por su consistencia y regularidad, con media siempre entre el 9-11%.
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| Fuente: Rocobike |
Partimos de la localidad comentada, a los pies del lago de Bourget, para dirigirnos por la D42 hacia el oeste remontando gran desnivel. El inicio se encuentra en el centro de la localidad, justo al lado de la alcaldía.
Los primeros dos kms. y los últimos metros antes de coronar son los más suaves de esta dura escalada, con porcentajes en ambos casos entre el 5-7%.
En el inicio tenemos referencia visual de la antena de comunicaciones que se encuentra en la cima, pero la escalada es básicamente un recorrido por pista estrecha en un gran manto de zona boscosa, con lo cual esa referencia la perdemos.
A partir del km. 2 y hasta el km. 13 todos los kms. por los que transitamos tienen una media entre el 9-10% muy uniforme y con rampas máximas como máximo al 12-13%.
En este sentido, si en algo destaca la dureza del puerto es en su consistencia, ya que no hay ningún descanso remarcable, pero por lo contrario tampoco pasaremos por pendientes imposibles.
Aunque la ascensión, como hemos comentado, es muy homogénea, quizá el sector más exigente sea el comprendido entre el km. 3-4, con una media del 10,4% y con varios tramos con máximas entre el 12 y el 13%.
En una escalada instalada en un bosque tupido se agradecen los carteles indicadores km. a km. donde la mayoría de ellos marca la referencia de un 10%.
Una vez hemos salido de la población de Bourget-du-Lac tendremos que superar un total de 12 curvas, algunas de ellas horquillas muy marcadas y con desnivel elevado.
Como puntos fuertes destaca el hecho de ser un lugar apenas transitado por vehículos a motor, cosa que se agradece viendo el ancho de la pista como se puede observar en las imágenes.
Conforme nos acercamos a la cima del puerto el bosque se va aclarando, pero no es hasta que tenemos referencia visual con la torre de comunicaciones, a pocos metros de coronar, cuando nos damos cuenta de que el puerto está a punto de finalizar.
Finalmente coronamos este muy exigente puerto a una altura de 1504 m. El descenso hacia su vertiente oeste lo realizamos con mucha precaución dado su estrechez, poca visibilidad y el asfalto rugoso y con algo de gravilla. Desde la cima hay un bonito mirador que no pudimos observar por la niebla.
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