El Passo dal Fuorn, conocido en alemán como Ofenpass, es uno de los pasos más representativos del cantón de los Grisones, en Suiza. Conecta el valle de Engadina con la región de Val Müstair, sirviendo de unión natural entre Suiza e Italia. Su cima alcanza los 2149 m de altitud, atravesando el corazón del Parque Nacional Suizo, lo que convierte el recorrido en un espectáculo natural, rodeado de bosques espesos, prados alpinos y un paisaje que va ganando altura de manera progresiva hasta endurecerse en la parte final. Asimismo, es un puerto de gran importancia histórica y cultural, ya que ha sido durante siglos un paso de comunicación y comercio. Hoy en día, es una vía transitada tanto por vehículos como por ciclistas que buscan la belleza de sus paisajes y la dureza de su ascensión.
Aunque el Ofenpass no ha sido protagonista habitual del Giro de Italia, se ha utilizado en ocasiones como puerto de paso estratégico en la aproximación a etapas de alta montaña en los Alpes suizos e italianos. Su situación cercana al Stelvio y al Umbrailpass lo hace muy interesante desde un punto de vista deportivo, pudiendo encadenarse con colosos que han marcado la historia de la carrera rosa. Además, su altitud y su exigencia en la parte final lo convierten en un paso capaz de seleccionar el pelotón antes de batallas mayores.
📊 Altimetría
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Longitud: 28,0 km
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Desnivel: 1.289 m
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Pendiente media: 4,6 %
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Pendiente máxima: 11 %
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Altitud de la cima: 2.149 m
Características del ascenso: Subida muy larga, de desgaste, que alterna tramos suaves con sectores más duros, especialmente en los últimos kilómetros.
Orientación: La ascensión se realiza en dirección oeste, ascendiendo desde el Val Müstair hacia Engadina, siempre rodeada de naturaleza alpina. Pasamos de la SS41 a la vía 28 en Suiza.
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Fuente: cyclingcols |
El inicio del ascenso lo encontramos en la localidad italiana de en Glurns (Glorenza), a 920 m, con unos primeros kms suaves, lo que permite tomar ritmo en los primeros compases sin excesiva exigencia.
Los primeros kilómetros hasta Ponte di Clava presentan rampas suaves (3-4%), ideales para calentar y preparar el cuerpo para un trazado de dificultad ascendente y especialmente largo.
A partir de la localidad citada, la pendiente comienza a rondar el 5%, mostrando ya un perfil más serio aunque aún llevadero.
Rodamos aún por terreno italiano, por una vía de doble sentido ancha y en perfecto estado, pero bastante transitada, ya que es un paso fronterizo.
La llegada a Tubre/Taufers im Münstertal provoca que pasemos el paso fronterizo y entremos en suelo suizo, adentrándonos en el valle de Müstair. Durante los próximos 3 kms los porcentajes serán casi llanos.
Tras superar Müstair, la carretera ofrece vistas de su monasterio benedictino, declarado Patrimonio de la Humanidad y es donde verdaderamente hay un punto de inflexión porque los porcentajes empiezan a ser regulares.Pasando el km 12 de ascenso, se alternan rampas de 4-5%, que todavía permiten cierta recuperación antes de la dureza final.
El valle, amplio y majestuoso, entre grandes prados alpinos, nos permite observar las rocosas cumbres alpinas colindantes, en un recorrido espectacular.Al pasar por Santa Maria im Münstair, la altitud ya se acerca a los 1400 m, con un paisaje que mezcla bosques y praderas. Dejamos a la izquierda el ascenso por el Passo Umbrail, puerto más alto de Suiza, hasta el coloso Passo Dello Stelvio.
Desde aquí, la pendiente se mantiene sobre el 5-6%, con un trazado más regular y sin descansos significativos.
En Valchava, la carretera se adentra en un entorno mucho más alpino, con largas rectas y menos poblaciones. Disminuye bastante la densidad del tráfico de vehículos a motor. Tenemos cerca de un km con una rampa al 9%.
Tras pasar por Fuldera, la carretera se estrecha ligeramente, ganando ambiente de alta montaña. De nuevo, pasamos por varios kms de falso llano hasta el sertor final.
En Tschierv (a unos 1.660 m) empieza la parte decisiva del puerto, con las rampas más exigentes. Nos encontramos a 6 kms para coronar.En este sentido, las pendientes se estabilizan, después de un km al 5%, en una media del 9,7%, con cotas máximas que llegan al 11-12%.
Aparte de la comentada dureza, los kms finales enlazan varias impresionantes curvas de herradura, junto con una final muy amplia que desemboca en la cima.
En los 5 últimos kms pasamos de kms cercanos al 9%, para los dos siguientes kms al borde del 10%, sin ningún tramo de descanso.
Superadas las curvas de herradura comentadas, la sensación es que estamos a punto de coronar, pero, sin embargo, han nos quedan los 2 kms finales.