Mostrando entradas con la etiqueta Puerto del Collao. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Puerto del Collao. Mostrar todas las entradas

ASCENSO A VISTABELLA DEL MAESTRAT (por Atxeneta de Maestrat)

El ascenso a Vistabella del Maestrat desde Atxeneta es una de las grandes travesías de montaña del interior de Castellón. No se trata de un puerto explosivo, sino de una larga sucesión de subidas, descansos y repechos que acumulan desgaste progresivo hasta alcanzar una de las poblaciones más altas de la Comunitat Valenciana. El recorrido atraviesa el corazón del Maestrazgo, con carreteras tranquilas, paisajes abiertos y una sensación constante de aislamiento.
La subida se articula en dos grandes bloques: una primera ascensión continua hasta el Port del Collao (1.056 m) y, tras un descenso intermedio, un segundo ascenso sostenido hasta Vistabella del Maestrat a través del Coll del Vidre (1.246 m). Es un puerto de fondo, ideal para ciclistas que disfrutan del esfuerzo prolongado y del ciclismo de resistencia. Asimismo, Vistabella y el Maestrazgo son territorios clásicos del cicloturismo de calidad, muy apreciados por su baja densidad de tráfico y su carácter montañoso. Aunque este ascenso no es habitual en finales de etapa de grandes vueltas, sí ha sido utilizado en marchas cicloturistas, pruebas regionales y entrenamientos de fondo.
Powered by Wikiloc

Altimetría y características

  • Distancia total: 24,4 km

  • Altitud inicial: ~400 m (Atxeneta del Maestrat)

  • Altitud final: 1.246 m (Vistabella del Maestrat)

  • Desnivel acumulado: cercano a los 900 m, con descensos intermedios

  • Pendiente media global: moderada, pero muy irregular (3%)

  • Cima intermedia: Port del Collao (1.056 m)

  • Segundo collado: Coll del Vidre (1.245 m)

  • Pendientes máximas: rampas puntuales del 8–9 %

  • Carretera: estrecha, buen asfalto, tráfico muy reducido (CV-170)

  • Entorno: bosque mediterráneo, altiplanos y paisaje de alta montaña interior

Fuente: altimetrias.net
La salida desde Atxeneta del Maestrat por la CV-170 es suave, con pendientes en torno al 3 %, ideales para ir entrando en calor mientras se abandona el entorno urbano.
En los primeros kilómetros, la carretera avanza entre campos y suaves lomas, sin exigir todavía un esfuerzo serio, permitiendo encontrar un ritmo cómodo.
A partir del km 2–3 aparecen los primeros repechos claros, con porcentajes que ya rondan el 5–6 % y anuncian el carácter montañoso del recorrido.
El ascenso se vuelve más constante al dejar atrás los cruces iniciales, con tramos sostenidos que obligan a mantener una cadencia regular.
La carretera gana altura de forma progresiva, alternando pequeñas rectas con curvas amplias, siempre rodeada de vegetación mediterránea.
Entre los km 5 y 7 el puerto se consolida, con pendientes cercanas al 6 % y una sensación clara de estar entrando en una subida de largo recorrido.
El entorno se vuelve más solitario y abierto, y el paisaje empieza a mostrar las primeras vistas amplias del Maestrazgo.
Alrededor del km 8 aparece uno de los tramos más serios, con rampas cercanas al 9 % que rompen el ritmo acumulado.
Tras este esfuerzo, la carretera ofrece un breve alivio, permitiendo recuperar antes de encarar la parte alta del Port del Collao. La aproximación es sostenida pero llevadera, con pendientes en torno al 5–6 % y una subida muy constante.
La coronación del Port del Collao (1.056 m) llega tras una larga progresión, sin rampas extremas pero con desgaste acumulado.
Tras el collado, giramos a la izquierda dirección Vistabella (CV-170) y comienza un descenso claro que permite soltar piernas y disfrutar del paisaje abierto del altiplano.
El descenso es tendido y cómodo, aunque corto, sirviendo más como transición que como auténtico descanso.
Al llegar a la zona de Xodos (otra de sus vertientes) y La Xaparra, el terreno vuelve a cambiar, con un nuevo tramo ascendente.
Este segundo ascenso arranca de forma progresiva, con pendientes moderadas que vuelven a exigir concentración tras el descenso.
La carretera se estrecha y el paisaje se vuelve más agreste, con sensación de alta montaña interior. En la aproximación al Coll del Vidre, las rampas se endurecen ligeramente, rondando el 6 %, ya con el cansancio acumulado.
Superado este punto, el perfil sigue siendo ascendente, pero con pequeñas ondulaciones que rompen la regularidad.
Los últimos kilómetros hacia Vistabella combinan repechos y descansos, siempre en un entorno abierto y muy expuesto al viento.
La llegada a Vistabella del Maestrat, a 1.246 m de altitud, culmina una travesía exigente y muy completa, con la satisfacción de haber superado una de las ascensiones más largas y auténticas del Maestrazgo.

AMAZON