PASSO DEL MORTIROLO/ PASSO DE LA FOPPA (por Tovo Sant'Agata)

El passo del Mortirolo o passo de la Foppa es un puerto de montaña alpino que comunica la Alta Valtellina con la Alta Valmonica. Es un lugar de grandes contiendas bélicas en la Segunda Guerra Mundial entre partisanos y tropas alemanas, pero su máxima popularidad fue a través del mundo de la bicicleta, considerado hoy por varias vertientes como uno de los puertos más duros de Europa.
Su origen es de pista alternativa al puerto de Aprica, mucho más cómodo, pero lo que realmente puso su nombre como gran ascensión ciclista fue su dureza junto con el paso del Giro de Italia. Ese vuelco tuvo lugar en el lejano 1990, cuando se asfaltó su vertiente más septentrional, por Mazzo in Valtellina. Se ha ascendido en varias ocasiones, dejando para el recuerdo gestas como la del año 1994, cuando un emergente Marco Pantani se despegó en sus duras rampas de adversarios como Miguel Induráin, Eugeni Berzin y su amigo Claudio Chiappucci. En 2006, en la localidad de Piaz de l'Acqua se colocó una escultura póstuma dedicada a aquella gesta.
Asimismo, el puerto cuenta con varias pendientes. Después de años atrás realizar la más popular, la comentada por Mazzo, este año tuvimos la suerte de escalar otras más suaves o incluso más duras, como la de Tovo di Sant'Agata, asfaltada en 2012. También destacamos su vertiente por Grosio. Sin embargo, la más suave en cuanto a recorrido, pero con más desnivel es por Tirano, a través del Valico de Trivigno.
Fuente: cyclingcols
Sus números asustan, con una longitud de 12,8 kms. con una media del 10,4% y desnivel total a remontar de 1348 m. El paso cuenta con rampas máximas por encima del 23%, una auténtica locura.
El inicio del puerto está muy cerca de Mazzo, a tan solo varios kms., y se une a esta vertiente a 1,5 kms. para coronar. Aunque está bien indicado, sí que tenemos que realizar diferentes giros por el cementerio de la localidad.

Pasamos de la via Stelvio (SP27) a la via cimentero donde está la indicación en una clara orientación hacia el sureste. La pista asfaltada es estrecha y muy sinuosa. Puede tener zonas sucias por lluvias, pero en general, por su popularidad ciclista, suelen estar perfectamente acondicionadas.
La vía nos da la bienvenida con un cartel que nos marca rampas máximas al 18%. Debemos tener en cuenta que los primeros 7,5 kms. tienen medias entre el 10 y el 15% mantenidas y máximas alrededor del 18%.
El paso casi en todas las vertientes transita por recorridos muy tupidos de masa forestal, de manera que sus escaladas tienen un punto monótono dentro de su gran complejidad. Aquella sensación de que nunca se acaba.
Sin embargo, siendo un lugar de difícil acceso, toda la escalada está llena de pequeñas aldeas y segundas residencias que nos sorprendió, y aunque el tráfico es bajo, puede llegar a ser peligroso en los descensos dada su estrechez.
El trayecto tiene continuas curvas de herradura que remontan la montaña de forma agresiva. Salvo un pequeño tramo al 7% en el km. 3'5, hasta la localidad de Piazza la tortura no tiene ningún tipo de clemencia.
Conforme vamos ascendiendo encontramos algunas zonas de pasto junto con granjas o residencias que nos permiten tener un poco más de referencia del trayecto a seguir.
Aunque en los primeros 7 kms. hay varias rampas muy duras alrededor del 15% (incluso una corta al 18%), uno de los lugares más exigentes de esta vertiente se encuentra en el km. 8 aproximadamente, con una rampa contundente -casi 500 m.- entre el 15 y el 17%.

Del km. 7 al 8'5, -la zona que vemos en las imágenes- se modera bastante la pendiente situándose entre el 8-9%, que dada la dureza extrema, se agradece.
A aproximadamente 5 kms. para coronar llegamos a la comuna de Pradasc. De nuevo vuelve a aumentar la pendiente con una dura rampa entre el 12-13%.
Este sector tenemos que ir con cuidado, ya que hay diversos caminos asfaltados que nos pueden desviar del camino correcto. Sin embargo, está muy bien indicado.
Pasada la rampa tenemos un pequeño altiplano en la que es la zona más suave de esta vertiente, un km. entre el 2-4% antesala de la zona más dura.
Sobre el km. 10, con un inicio a 12-13%, superaremos una rampa del 16,5% de media en una pista más estrecha, si cabe, incluso con algún tramo cementado.
Es el lugar donde se sitúan los porcentajes más agresivos, y esta vez durante bastantes metros. Con medias infernales las cotas máximas superan el 20%
Esa dureza disminuye, en parte, en la comuna de Il Fortello, con medias al 12-16%, pero por suerte por debajo de la pared que acabamos de rebasar. Mediante una cerrada curva de herradura conectamos con la vertiente de Mazzo, a 1,5 kms. para coronar.
Pasado el cruce aún nos quedará por superar una rampa al 15%, pero la dificultad irá menguando dando lugar a porcentajes más asequibles. En el estreno del Giro por esta vertiente no se coronó el paso, sino que se descendió hasta Mazzo.
A un km. para coronar dejamos a la izquierda el refugio Antonioli (1785 m.). Tan solo nos quedará realizar  las últimas curvas de herradura (estas numeradas porque forman parte de la vertiente de Mazzo).
Los porcentajes en este tramo final tienen una pendiente sobre el 9-8%. Realizada la última curva de herradura, la de la imagen, tan solo nos quedará pasar por la recta final.
En la cima se encuentra un pequeño museo en un contenedor de transporte para la interpretación del lugar (La Tormantissima), como también la roca de la imagen que nos indica la cima y la altura del gran puerto. Coronamos a 1852 m.

COL DE LA CAYOLLE (por Saint-Martin-d'Entraunes)

El col de la Cayolle (2324 m.) es un paso de montaña situado en los denominados Alpes del Sur, al este del Mont Pelat, en el macizo de Mercantour. Une los Alpes Marítimos y los Alpes de la Alta Provenza, siendo una interesante ascensión desde el punto de vista cicloturista. En su vertiente sur conecta con el impresionante col des Champs por Saint-Martin-d'Entraunes. Concretamente, enlaza el valle del Bachelard con el valle del Var.
En una encrucijada perfecta de puertos, aparte del col des Champs, también tiene conexión con el col d'Allos por su cara norte o las pistas de esquí de Pra-Loup. Sin embargo, es una zona muy poco transitada por el Tour de Francia, una verdadera lástima. Desde el lejano 1973 con el paso en primer lugar de Vicente López Carril, no se ha sido parte de una etapa de gran vuelta.
En cuanto a la altimetría, el puerto tiene una longitud de 20,5 kms. con una media del 6,3%, con un desnivel total a remontar de 1290 m. Desde el fondo del valle del Var, en Guillaumes, el paso tiene una clara inclinación que se acentúa a partir de Saint-Martin-d'Entraunes. También es muy interesante su vertiente por Barcelonnette, una de las ascensiones más bonitas de la zona.
Fuente: cols-cyclisme.com
En nuestro caso, una vez descendido el col des Champs por la localidad citada, iniciamos el ascenso pasando de la D78 a la D2002, en una clara orientación hacia el norte.
Los porcentajes en este inicio de la escalada son bastante suaves, alrededor del 4% en un valle abierto y sin apenas arboleda.
Esta se intensifica una vez pasado el túnel de Bramus (alrededor del km. 2), túnel corto pero bien iluminado. Paralelamente vemos la antigua vía escarbada en la roca.
Incluso desciende algo la pendiente y se sitúa por debajo del 3% al acercarnos a la localidad de Entraunes, antes de llegar al km. 6.
Atravesamos la localidad y progresivamente aumenta la pendiente de forma bastante agresiva llegando a casi el 9%.
Dejada atrás la población se reduce drásticamente el ancho de la vía pero continua estando en perfecto estado. En el día de la escalada, pleno mes de agosto a media mañana, encontramos muy poco tránsito por esta vertiente.
Entramos en el sector más exigente del puerto en cuanto a pendiente. Realizaremos algo más de 3 kms. (del km. 6 al 9,5) con medias entre el 7-9%.
Como vemos en las imágenes, cambia durante esos kms. las características del recorrido, con predominio de zona rocosa y arenosa muy común en las cumbres de los Alpes Marítimos.
Pasaremos por dos curvas de herradura - la última cercana al 9%- para pasar a la ladera opuesta. Es una zona agresiva en cuanto a dureza y que se agarra bastante.
En una zona realmente espectacular pasamos túnel y galería junto al puente Saint-Roch, precioso puente de arcos que atraviesa el río Var para aproximarnos a la localidad de St. Saveur.
Del km. 9 al 11 los porcentajes son irregulares, pero mucho más cómodos, en torno al 2-5%, pero al aproximarnos a St.Saveur (apenas cuatro casas mal contadas) volverá a aumentar.
Como vemos en las imágenes, es un valle ancho sin demasiada masa forestal, cosa que nos permite tener preciosas panorámicas para casi cualquier lado, así como observar los grandes macizos alpinos de la zona.
Desde la pequeña comuna comentada hasta Entenc la pendiente aumenta y se asienta durante un km. entre el 7-8%. A la derecha dejamos al pequeño lago homónimo (imagen inicial de la entrada). 
A aproximadamente 7,5 kms. para coronar, realizaremos unos km. paralelos al Var para acabar la escalada con 9 curvas de herradura muy bonitas.
La larga recta comentada, con porcentajes entre el 7-8% salvo un pequeño tramo en Entenc, llega a su fin una vez hemos llegado al refugio de la Cantonnière (1870 m.).
De nuevo entramos en zona boscosa, no demasiado espesa, pero dadas las altas temperaturas de la zona en meses estivales se agradece un poco de sombra.
En cuanto a los porcentajes hasta coronar son muy regulares, y salvo una rampa corta y dura en el km. 16'7, el resto es muy estable en pendientes entre el 7-8%.
Después de pasar por la tercera horquilla de esta fase final del puerto en la zona alta del valle del Var, pedaleamos por un pequeño túnel, como podemos observar en la imagen.
Pasado el túnel, al fondo de la imagen, es donde se encuentra una pequeña rampa al 10% aunque la media del km. es sobre el 8%.
En un paraje impresionante, dejamos atrás esa mezcla tan especial entre prado alpino, algo de masa boscosa y los macizos entre arenosos y rocosos comunes en la región. Al fondo la Tête de la Sanguinière (2856 m.).
Los kms. finales constan de las últimas curvas de herradura encadenadas entre ellas unidas por rectas. La vía es estrecha desde el refugio, pero está muy bien asfaltada y señalada.
En el último km., que se hace bastante largo, predomina el prado y la roca, como también en su vertiente opuesta.
Finalmente coronamos este gran puerto alpino a una altura considerable de 2326 m. En la cima tan solo se encuentra un característico hito donde nos realizamos esta fotografía.

COL DES CHAMPS (por Colmars)

El col des Champs es un paso de montaña con una altura de 2087 mts. y une la Alta Provenza con los Alpes Marítimos, todo ello en el Parque Nacional del Mercantour. Asimismo, es un puerto bastante inhóspito para el gran público y solo se ha ascendido una vez en el Tour de Francia, concretamente el año 1975 con la leyenda Eddy Merckx pasando en primera posición, en la famosa etapa que supuso en el final en Pra-Loup su último maillot amarillo en beneficio de Bernard Thévenet.
El paso está dominado por la cima de la Dent du Lièvre y la Tête de  l'Encombrette (macizo de Pelat).
El puerto forma parte de la denominada ruta de los trois cols, interesante ruta circular con tres puertos por encima de los 2000 m. que une el col d'Allos con el col de la Cayolle mediante este puerto, es decir, uniendo el valle de Allos (Alto Verdon) con el valle del Var.
Años después de realizar su tremenda vertiente este, por Saint-Martin-d'Entraunes, realizamos este año esta vertiente mucho más boscosa y regular en sus porcentajes, como también bastante más corta. En cualquier caso, sus dos vertientes tienen en común la dureza de un gran puerto alpino.
Fuente: cyclingcols
Desde la ciudad fortaleza de Colmars, lugar muy recomendable para visitar, el puerto tiene una longitud de 11,4 kms. con una media del 7,2%, con un desnivel total a remontar de 832 m. 
Partimos de Colmars con una descarada orientación hacia el este, pasando de la D908 (el col d'Allos en su vertiente sur) a la estrecha y sinuosa D2. El desvío se encuentra a las afueras, y en día de mercado nos costó encontrarlo.
Los primeros 5 kms. tienen una media muy estable entre el 7-8%, con algún pequeño tramo muy cerca del 9% por una vía secundaria, estrecha y casi sin tráfico dadas sus características incómodas para el tráfico.
El inicio se encuentra a pocos metros del fuerte Saboya, en las afueras de Colmars, y nada más realizar las primeras rampas -con el 7-8% comentado- la pista asfaltada remonta la montaña con diferentes horquillas, todas ellas en un ambiente húmedo y sombrío provocado por el denso bosque.
Hasta pasado el km. 3 pasaremos por un total de 8 curvas de herradura, cerradas y bastantes espectaculares, con una asfalto en buen estado pero con bastante gravilla.
En este sector dejamos a la derecha el Oaratoire de St. Jean (a la derecha de la imagen), junto a una zona de pícnic y de prado para pasto.
Es el primer momento de la escalada en la que tenemos una bonita vista del entorno y los grandes macizos de esta interesante región alpina.
Realizamos tres nuevas curvas de herradura para continuar por una vía algo menos sinuosa para después del descanso del km. 5 (medio km. al 5%) llegar al pequeño complejo de Ratéry (cota 1700), zona para el esquí de fondo.
Los 6 kms. hasta coronar, en general, tienen una fisonomía parecida: gran zona boscosa, vuelven las curvas de herradura -de un total de cuatro dos de ellas muy marcadas- y porcentajes similares entre el 7-8%. 
El bosque no es tan espeso en estos kms. finales, y como en la mayoría de grandes pasos cercanos por encima de los 2000 m., el bosque es substituido por una genuina y bonita masa rocosa y arenosa.
El paso es muy inhóspito, especialmente en esta vertiente. Comparado a la gran cantidad de ciclistas que nos encontramos en el vecino col d'Allos, fueron una minoría los que también realizaron el col des Champs.
Alrededor del km. 10, casi fuera del dominio boscoso, realizamos el enlazado de las dos últimas curvas de herradura. El resto hasta la cima bordea la ladera hasta coronar.
Como nos pasó años atrás al realizar su vertiente opuesta, la zona suele ser muy calurosa en meses estivales, especialmente en los tramos más expuestos al sol. No hay ninguna fuente ni lugar donde repostar, de manera que es conveniente hacerlo en Colmars.
Desde nuestro punto de vista, sin tener la belleza de su otra vertiente, el final es bonito con esa característica composición en tonos amarronados junto con prados y macizos rocosos.
En los 5 kms. finales, al 7-8%, se combina alguna que otra rampa máxima al 9% junto con algún tramo sobre el 5%.
Asimismo, el último km. es bastante más plácido con un inicio alrededor del 4% que va disminuyendo hasta convertirse en un cómodo llano.
Coronamos a una altura de 2080 m., esta vez sin podernos fotografiar en el cartel indicativo del puerto. Sí que perdura el pequeño monolito de carácter militar, ya que por ese motivo se construyó este paso de montaña, frontera en el 1823 entre Francia y el Piemonte.